En lo que un día fue una hermosa bodega de crianza y envejecimiento de vino fino; ahora vislumbra por belleza propia un maravilloso Hotel de cuatro estrellas en el que se ha mantenido la arquitectura de antaño, donde la gastronomía y el entorno se funden para ofrecerles una estancia inolvidable
48 habitaciones amplias y confortables, 2 junior suites y 1 suite. Todas ellas con caja de seguridad, minibar, mesa escritorio, A.D.S.L. gratuito (wifi en zonas nobles) y T.V. vía satélite.